lunes, 20 de julio de 2009

«Tu destino está en tus manos»

Imagen de EFE.

Mi querido Tolico: resiste, que creemos tenerte localizado; a Olivo se lo debemos, y confío en que próximamente podamos abrazarte. ¡Quiéranlo los hados! ¡Por Dios! No sabes el hueco que has dejado. ¿Cuándo hemos incorporado el último post? Ya sé que es mi responsabilidad, pero el blog no es el mismo sin ti. Soy así de limitado. Lo siento. Por cierto, envía un abrazo a Jorge y a los suyos, que ya se encuentra de vacaciones.

Anda, pregúntame por la entrada de hoy. O mejor, no me preguntes y yo te la narro.
Mi querido amigo, el colega se halla descolocado porque Barack Obama ha dicho a sus conciudadanos negros que «Tu destino está en tus manos». Cierto que la obligación de todo político es convertirse en líder, arrastrar a la ciudadanía…, pero no puedo evitar preguntarme si el señor Obama conoce el Harlem o el Bronx de hace años y si sabe de la influencia del medio en el individuo. De haber nacido o vivido en estos lugares emblemáticos o en cualesquiera otros semejantes de su mundo, ¿habría alcanzado la primera magistratura del país? Claro que su obligación es romper cadenas, señor Obama, pero no se pase.

lunes, 13 de julio de 2009

«El roble de la discordia»

Imagen de elpais.es.

Los vecinos de Jaslo, en Polonia, aplauden o reprueban la decisión municipal de talar el roble con que Hitler obsequió a la población. Ya ves, Tolico, que España no posee la exclusiva de la polémica, ni es cuestión de longitud geográfica, ni…

domingo, 12 de julio de 2009

De vientos… y tempestades

Imagen procedente de Wikipedia.

Revisando una presentación que me envía Antonio, me detengo en estos tres pensamientos:

Cuando no sopla el viento, incluso la veleta tiene carácter.
Stanislaw Jerzy Lec

El pesimista se queja del viento; el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas.
William George Ward

Para quien navega sin rumbo ningún viento es favorable.
Séneca

P.D.: Gracias a Ascensión y a Raquel por su interés. Estamos persuadidos de que Tolico vive y mora en una vivienda próxima, pero somos incapaces de determinar cuál. Pusimos carteles en los edificios del entorno, pero la persona que lo acoge no se da por enterada. ¡Lástima!

martes, 7 de julio de 2009

¿De qué hablamos?


Don Florentino como muñidor y Cristiano Ronaldo como figura han vuelto a arrasar. Pero no te eches a temblar, Tolico, que pretendo no repetirme. Observo con pena y con desazón la actitud de unas docenas de aficionados exaltados que pusieron en peligro la integridad del deportista y que obligaron al servicio de seguridad a ‘ponerlo’ a buen recaudo. ¡Qué pena, Señor! Pero, insisto, no quiero referirme a este circo; permíteme ahondar en una cuestión social y que yo calificaría de más profunda.

Poco después del fichaje del portugués, me enteré de que Banco Santander y Caja Madrid habían aportado el dinero que implicó la operación. Las decisiones del Santander son responsabilidad del señor Botín y, de su resultado, confío en que para bien, él responderá ante sus accionistas. A lo que pretendo referirme es a Caja Madrid.

Escuché en las últimas semanas que las autoridades monetarias españolas se encuentran con dificultades para hacer entender a Europa qué son nuestras cajas de ahorros —controlan aproximadamente la mitad de la economía del país—, y, en verdad, que no me sorprende. En general, nacieron como montes de piedad, instituciones destinadas a aliviar las apreturas de los españoles más humildes, que hipotecaban cualquier objeto con un mínimo de valor y cuyo intercambio permitía/permite un respiro a la familia afectada. Conocí hace años a una extraordinaria mujer que en un gesto de sinceridad reconoció ante un grupito de personas conocidas que, tiempo ha, los lunes empeñaba en el Monte de Piedad madrileño el traje de su marido, y lo recuperaba el sábado, cuando él cobraba, para que pudiera lucirlo el domingo.

No me recuerdes, querido Tolico, que éste es el siglo XXI, que ya lo sé. No entraré a valorar si facilitar el dinero a don Florentino para que compre los servicios del joven Ronaldo es técnicamente una buena operación; espero que sí por lo que me tocaría como contribuyente —Caja Madrid es una de las instituciones «más ayudadas por el Gobierno»—. Voy más lejos. Me pregunto si el padre Piquer, su fundador hace tres siglos, apadrinaría la operación Cristiano Ronaldo o preferiría atender con ese capitalazo las necesidades de docenas, cientos o miles de clientes honrados de la institución que necesitan de un respiro, de un margen de confianza en estos difíciles momentos… Y me pregunto también si el padre Piquer aprobaría la adquisición de un utilitario de más de medio millón de euros de coste, más caro que el que utiliza el señor Obama. Por favor, pregúntaselo cuando coincidas con él.

domingo, 5 de julio de 2009

Bernard Shaw y el sentido común


Imagen procedente de Wikipedia.

El sentido común es instinto. Suficiente sentido común es genio.

George Bernard Shaw

sábado, 4 de julio de 2009

Confirmación de que el planeta ya es aldea


Imagen procedente de Wikipedia.

Alberto me envía el enlace, confirmación una vez más de que
el planeta ya es aldea.

P.D.: nuestra bienvenida más sincera a los hermanos brasileños de Pelotas y Porto Alegre.

viernes, 3 de julio de 2009

Sociedad anestesiada y enferma



Imagen de 20minutos.es.

Del fichaje multimillonario de Cristiano Ronaldo ya nos ocupamos con pesar en el blog hace unas semanas. Hoy, con toda satisfacción, quisiera dejar constancia de que la nuestra es una sociedad viva, despierta, capaz de movilizarse para hacer frente a lo que sea menester. Aun en la distancia, soy capaz de intuir tu sonrisa sarcástica. De verdad lo escribo, Tolico: Florentino reunió en el estadio Santiago Bernabeu a casi 50.000 personas ansiosas por ver al señor Kaká —reconozco humildemente que debí preguntar por él—. Con todo lo que está cayendo socialmente y no dejamos de actuar como rebaño o como piara, y nadie abandonamos nuestra cuadrícula, pero, ¡qué no nos falte nuestra dosis de panem et circenses. ¡Pena de país y de sociedad, Señor!

jueves, 2 de julio de 2009

Dos siglos después…


«Alegoría de la Villa de Madrid», pintura exhibida en el Museo Municipal de Madrid.
Imagen procedente de Cervantes Virtual.

El cuadro conocido como «Alegoría de la Villa de Madrid» es el fruto de un encargo realizado a Goya por el Ayuntamiento capitalino a fin de congraciarse con José I Bonaparte. El pintor retrató al monarca en el medallón.

Cuando se marchó el francés, en mayo de 1812, el cuadro volvió al taller de don Francisco con la petición de que la efigie fuese sustituida por el término «Constitución», en alusión a la Carta Magna recién proclamada en Cádiz.

Vuelto don Pepe Botella a Madrid, la obra recuperó el retrato del Bonaparte.

Tras la expulsión de los invasores en 1813, la pintura exhibió de nuevo el término «Constitución».

Entre tanto, España abraza al Deseado, a Fernando VII, y se determina que sea su imagen la que ilustre la pintura.

Y no terminan aquí sus avatares. El retrato del absolutista fue sustituido por la expresión «Libro de la Constitución», y, años después, por la inscripción «Dos de Mayo», solución neutral con casi siglo y medio de existencia.

Y tú, Tolico, seguramente que te estás preguntando a qué viene el relato de la evolución sufrida por esta obra de arte. A que los seres humanos no tenemos remedio. Como Penélope, no dejamos de tejer y destejer. ¿Qué pensarán de nosotros los ciudadanos de dentro de dos siglos? Porque, nuestros políticos parecen incapaces de ocuparse de los problemas que de verdad nos afectan y se dedican a poner en marcha maniobras de provocación y de distracción.

miércoles, 1 de julio de 2009

Tolico eligió la libertad, un imposible



La viveza de Tolico, captada por Asier.

Por fin, después de un par de semanas, vuelvo al blog. La primera consideración que se me suscita es a quién escribo hoy: ¿a ti, amable lector?, ¿a Tolico?, ¿o a los míos y a mí mismo? Me dejaré llevar y veremos qué resulta.

Sucedió hace medio mes por la mañana. Yo me encontraba trasteando en mis cosas y Tolico, como era habitual, cantaba y volaba por la casa de acá para allá. En un momento dado, dejé de percibirlo, pero no le di importancia. Algunos minutos después, eché un vistazo, no lo vi y supuse que se encontraría relajado en algún rincón fresco, como hacía tantas veces en este tiempo. Un poco más tarde, comencé a preocuparme. Lo busqué por todas partes, incluidos los armarios de la cocina, subí a la terraza, bajé planta a planta revisando cada ventana de la escalera, rodeé la manzana y las inmediatas…, y nada. Resultaba evidente que se había ido y me sentí presa de un tremendo desasosiego.

Los vecinos saben de su ausencia; dimos la voz de alarma en los establecimientos inmediatos; hemos hecho sonar la Sinfonía de los Juguetes, su melodía favorita, como un auténtico sin fin, pero nadie tiene conciencia de haberse cruzado con Tolico… Y cuando volvemos a casa debemos enfrentarnos a la realidad de que no está. ¿Es una tragedia que ya no esté? Según crezco en años, me convenzo de que únicamente podemos entender en los demás lo que hayamos vivido en nuestro pellejo.

En un primer momento fui incapaz de percibir por dónde se había marchado el colega. Luego, caí en la cuenta de que una cortina dejaba abierto un palmo de ventana cruzada; y esa ventana, confín y barrera hasta entonces, se transformó en el pasaporte a su libertad. ¿A qué libertad? A un imposible, porque Tolico nació en cautiverio y creció y vivió querido, mimado y desconociendo la dureza y la rudeza de la vida más allá de estas cuatro paredes. Tal vez la curiosidad y especialmente los subidones de testosterona que experimentaba periódicamente, le llevaron a intentar independizarse; y al tercer intento, lo logró. En muchas ocasiones se me partió el alma estos días imaginándolo acurrucado, presa de la angustia, del temor y de la inanición.

¡Pobre Tolico! Su Olivo lo sabe vivo, prisionero en alguna jaula, y no deja de penar. Yo lo imagino vivo también, al otro lado del tiempo, «juegando» con el abuelo Cesáreo, posado en su hombro, provocándolo, picoteándole los dedos…

¿Y el blog? El blog es Tolico. Él es su alma, su estrella, y sin él, sin su participación, esta tribuna resultaría un fraude. Así que, desde hoy, el blog se reorienta y evoluciona a Cartas a Tolico.

P.D.: Gracias a l@s amig@s «anónim@s» que estos días de sequía nos dejaron sus aportaciones. «El hábito de pensar» ¡Pensar! ¿Estás loc@, estimad@ amig@ anónim@?
Asier acaba de atravesar Europa a lomos de su Polski. Si Tolico estuviera aquí diría: ¡Colegas, visitad la página de Asi, que ha incorporado obras nuevas!