(Imagen tomada de Wikipedia)
—¿Por cuánto podría yo vender la Puerta de Alcalá, Manoliño?
—Pero, ¿cómo vas a vender un bien que no es tuyo?
—Yo, como madrileño de nacimiento que soy, me siento titular del monumento.
—Y, ¿a quién se lo venderías, colega? Baja de la nube.
—¡Habrase visto con Manoliño! Si un iluminado es capaz de hacerse con el Empire State, yo no soy menos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario