jueves, 12 de febrero de 2009

El color del cristal


—Definitivamente, Manoliño, todo es irreal, todo es mentira.
—Tolico, diría que estás un poco bajo de tono.
—En la fotografía analógica —yo prefiero decir antigua—, empleáis los filtros, ¿para qué?
—Para modificar la percepción.
—No juegues con las palabras, Manoliño. Usáis los filtros para mostrar al observador una realidad distinta; en una palabra, lo estáis engañando. Y si pensamos en el Photoshop o similares, ¡la locura! De esto sí que sabe Asi.
—Dónde quieres ir a parar?
—A que, por fin, se le ocurrió a la ciencia aplicar el engaño a la vida ordinaria.
—Sigo sin entender.
—Siguiendo el descubrimiento ya centenario de Campoamor de que “todo es según el color del cristal con que se mira”, los investigadores trabajan en el diseño de unas gafas que engañen al usuario y lo liberen de la depresión y de otros males.
—Hoy, no te vendrían nada mal, colega.

P.D.: Lo lamento, Jorge. Parece que Tolico te hubiera percibido. A ver si encuentras unas gafas ad hoc, como las de la noticia, capaces de que el fisco vea la realidad igual que los administrados.

No hay comentarios: