jueves, 30 de octubre de 2008

Tolico se muda a Vilastose

—Me voy, Manoliño, me voy, me mudo.
—No entiendo nada, colega.
—No es porque ayer no hayas puesto post, que ya sé que estás muy cogido. Yo soy mayor y debo cuidarme.
—¿Es que no recibes atención en esta casa?
—No quieres entenderme, Manoliño. Fijo mi residencia en Vilastose porque no quiero morir.
—¿Es que en esa parroquia de Muxía, en la Costa de la Muerte, mana la fuente de la eterna juventud?
—Ignoro a qué se deba, pero allí la lógica de las estadísticas se hace añicos porque muchos vecinos sobrepasan el siglo de vida y no fallece nadie antes de cumplir los noventa. Y tú, sin decírmelo. Anda, entérate aquí.

martes, 28 de octubre de 2008

Lo viejo y lo nuevo

(Fotografía de La Voz)




—¡Lo viejo y lo nuevo! Eres un retrógrado, Manoliño. No te atreves a condenar lo nuevo, lo que no controlas o no controlas suficientemente, y añoras lo viejo. Y yo que confiaba en ti y te tenía en lo alto… ¡Qué desilusión!
—Créeme, Tolico, colega, si te digo de corazón que lamento tu desilusión. Para bien o para mal, tú eres como eres, y yo, también. Pero la realidad, una vez más, supera a la ficción. Y hete aquí que Mary Joyce, como en las viejas narraciones de aventuras, introdujo un mensaje en una botella desde el buque escuela canadiense Picton Castle y los lanzó al mar. Ocho días después, Jesús Manuel recoge en Ortigueira la botella con el mensaje.
—¡Qué increíble, Manoliño:
fantasía y realidad, de la mano!

lunes, 27 de octubre de 2008

¿Inversión o alarde y despilfarro?

—La noticia, Tolico, lleva unos días dándome vueltas en la cabeza: India envió un satélite a la Luna.
—¡Admirable tecnología la india! Ya sabes que éste es uno de los países emergentes y dará mucho que hablar en los próximos años.
—Yo diría que semejante tecnología, además de admirable, resulta envidiable, pero no puedo evitar ir un poco más lejos. India es el país de los extremos, y un sector amplísimo de sus más de mil millones de habitantes vive en la indigencia más absoluta, en contraposición a las castas escandalosamente ricas. Y me pregunto si el dineral que les costó fabricar la bomba atómica o enviar ese artilugio a la Luna no sería prioritario emplearlo en combatir la hambruna, en establecer un mínimo sistema sanitario y en proporcionar educación a tanto ser desasistido de la fortuna. Claro que esto, a lo mejor, resulta demagógico.
—Debe de ser harto complejo gobernar y verse obligado a tomar decisiones, Manoliño; así que, me quedo con el titular: un desembolso tan brutal, ¿es una inversión en verdad, como pretenden sus autoridades, o un alarde de fuerza y un despilfarro?

domingo, 26 de octubre de 2008

Despedida de Gabriel García Márquez

(Imagen tomada de Wikipedia)

A través del correo, recibo una comunicación en virtud de la cual García Márquez, enfermo de cáncer linfático, se despediría de sus amigos. De ella, a la vez que envío mis mejores deseos al egregio autor, entresaco estos párrafos:

“Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, aprovecharía ese tiempo lo más que pudiera.
Posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva, pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas no por lo que valen, sino por lo que significan.
Dormiría poco y soñaría más. Entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz. Caminaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen.
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol dejando descubierto no solamente mi cuerpo, sino mi alma.
A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que ¡envejecen cuando dejan de enamorarse!
A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar.
A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres… He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño por primera vez el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.
He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo cuando ha de ayudarle a levantarse.
Di siempre lo que sientes y haz lo que piensas.
Si supiera que hoy fuera la última vez que voy a verte dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.
Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría “te quiero” y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.
Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuánto te quiero y que nunca te olvidaré.
El mañana no le está garantizado a nadie, joven o viejo. Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si el mañana nunca llega, seguramente lamentarás el día que no tomaste tiempo para una sonrisa, un abrazo, un beso y que estuviste muy ocupado para concederles un último deseo.
Mantén cerca de ti a los que amas; diles al oído lo mucho que los necesitas, quiérelos y trátalos bien, toma tiempo para decirles “lo siento”, “perdóname”, “por favor”, “gracias” y todas las palabras de amor que conoces.
Nadie te recordará por tus pensamientos secretos. Pide al Señor fuerza y sabiduría para expresarlos. Demuestra a tus amigos y seres queridos cuánto te importan.”

viernes, 24 de octubre de 2008

Tolico, aterrado

—Cuéntame lo que te sucede, Tolico, que te encuentro tristón, apagado.
—¿Tristón y apagado yo? ¡Quiá! Lo que estoy es aterrado, Manoliño.
—¿Otra vez sacando los pies del tiesto? Anda, anda.
—Tú, tómalo como quieras, pero, lo que sucede, es gravísimo, ¿o es que no lees? Pues yo, bien que estudio los artículos de cabo a rabo, porque eso de que la crisis enfríe lo que se necesita que esté activo y muy activo en una relación, ¡ya me dirás! Si cuando en mejor forma necesitas estar, ¡zas!, se produce el gatillazo, ¿qué?
—Y yo que pensaba que los pajarillos vivíais despreocupados…
—¡Una leche! Y, para colmo…
—¿Todavía hay más?
—¿Que si hay más, Manoliño? ¿Y si tu compañera, aprovechando que estás dormido, te saja la colita? Y la guinda: ¿y si tu pareja te come para conseguir descendencia de más calidad? Porque, no te creas que el mal llamado sexo débil es débil de verdad. ¡Menudas lagartas! ¡Horror, no quiero ni pensarlo!

Disfunción eréctil, sajado de pene, canibalismo sexual

jueves, 23 de octubre de 2008

¡Reinventemos el futuro!

—El título, Manoliño, me dice que tienes bajo el tono.
—Desconocía tu capacidad como adivino, amigo.
—¿Adivino? ¡Simple observador!
—El caso, Tolico, es que varios flases martillean mis neuronas, a saber:

  • El número de estudiantes que no completan la educación secundaria (uno de cada tres), dobla la media de la Unión Europea.
  • De los países de la OCDE, somos el que gasta más en juegos de azar que en I+D.
  • Ninguna de nuestras universidades se halla entre las 150 primeras del mundo.
  • 7 de cada 10 estudiantes madrileños de 14 y 15 años suspenden matemáticas.
  • Para finales de año, los promotores acumularán un millón de viviendas pendientes de su venta.
  • Cada día, ingresan en las cárceles españolas 20 nuevos reclusos, la cifra más elevada desde que vivimos en democracia.

—No sigas, Manoliño, o conseguirás deprimirme. Alegra esa cara, que vivimos en la Arcadia feliz, y ¡reinventemos el futuro!

miércoles, 22 de octubre de 2008

¿Quién dijo crisis?

Hechos puros y duros. Haz tú, amigo lector, la valoración:


  • El presidente de la Xunta de Galicia dedica 480.000 euros (80 millones de pesetas) a la adquisición de un vehículo oficial blindado de altísima gama. Por otro lado, sus gastos de protocolo y representación correspondientes al primer semestre ascienden a 800.000 euros (133 millones de pesetas).
  • El alcalde madrileño y 102 altos cargos municipales se suben el sueldo casi un 12%. Por su parte, la alcaldesa de Córdoba lo hace en un redondo 12%.
  • En paralelo, se disparan las demandas ciudadanas de ayuda a Cáritas.

    Xunta, alcaldes, Cáritas.

martes, 21 de octubre de 2008

‘Topillo’ por aquí…

—Un topillo, ¿es un topo pequeño, Manoliño?
—La Real Academia Española no recoge este término, colega. Para Wikipedia es un roedor de pequeño tamaño. Recuerdo que mi abuela Juanita los aborrecía porque se instalaban en el pequeño huerto familiar y arruinaban su trabajo en pos de verdura y patatas para el autoconsumo.
—Es que, el cierre de la M-50 madrileña pone en peligro tres colonias de topillos.
—No te sientas aludido, Tolico, pero me encantaría conocer la percepción que tienen los padres de los probos denunciantes respecto de la atención que reciben de sus hijos.
—¡Qué malvado, pero qué realista eres, colega!

lunes, 20 de octubre de 2008

Cuestión de pulso

—¿Tienes problemas de pulso, Manoliño?
—Creo que no, Tolico, ¿y tú?
—Yo, Tolico, ¿problemas de pulso? ¡Quiá! Yo tomo un lapicero con el pico y pinto sin problema alguno lo que se tercie. ¿Es suficiente?
—No te justifiques, colega. Es que, nuestro alcalde, que sueña con reformar el eje Prado-Recoletos, aplaza las obras.
—Mejor, ¿no?
—Sí, pero amenaza con volver a la iniciativa cuando Madrid “recobre el pulso financiero”.
—¡Ay, Manoliño! Salta a la vista que esa reforma debe de ser multimillonaria, y no se atreve.
—¿Multimillonaria, Tolico? Don Alberto, cuando peleaba con el señor Leguina por conseguir la presidencia de la Comunidad Autónoma, esgrimía como argumento contundente que la Comunidad de Madrid era la más endeudada de este patio de vecindad en que se convirtió nuestra España. Cuentan las crónicas que cuando tomó posesión del Ayuntamiento de Madrid, nuestra deuda era la mitad de la que tenía comprometida el municipio barcelonés, y hoy supera a la de la media docena de capitales españolas más importantes.
—Te veo venir, Manoliño, igual que si te hubiera parido: te preguntas cuál será la magnitud económica de la reforma para que el señor alcalde eche el freno a su sueño.
—Y lo que se nos viene encima, colega, la nueva ordenanza de basuras, que podría reportarnos un nuevo impuesto, la ecotasa, y justas penalizaciones a los vecinos incívicos.
—No me digas más, Manoliño, porque quiero alcanzar el titular: cuestión de pulso. Y déjame enviar un guiño a mi amigo Asi: colega, enlaza aquí.

domingo, 19 de octubre de 2008

Vida y costumbres

Don Francisco de Quevedo finaliza El Buscón de este modo:

La justicia no se descuidaba de buscarnos; rondábanos la puerta, pero, con todo, de media noche abajo, rondábamos disfrazados. Yo que vi que duraba mucho este negocio, y más la fortuna en perseguirme, no de escarmentado —que no soy tan cuerdo—, sino de cansado, como obstinado pecador, determiné, consultándolo primero con la Grajales, de pasarme a Indias con ella, a ver si, mudando mundo y tierra, mejoraría mi suerte. Y fueme peor, como v. m. verá en la segunda parte, pues nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar, y no de vida y costumbres.

sábado, 18 de octubre de 2008

Excesos

El señor Botín, presidente del Banco Santander, y que imagino que algo debe de saber de banca, acaba de manifestar:

El origen de la crisis está en los excesos y la pérdida de referentes en un entorno muy favorable.

viernes, 17 de octubre de 2008

Tolico quiere estudiar Arquitectura en A Coruña

—¿Te has parado a pensar, Manoliño, en cuánto debe la sociedad a los arquitectos? Sin su ciencia no tendríamos puentes interminables ni edificios que retan a las nubes ni…
—Tienes razón, Tolico, tenemos una deuda inconmensurable con ellos, y en particular nosotros, con Pedro, que mostró una inagotable y francisca paciencia al atender hasta los más nimios requerimientos cuando necesitamos de sus servicios profesionales. Pero, la sociedad tiene igualmente una deuda impagable con los médicos, con los guardias de tráfico, los mineros, los picapedreros…
—¡Ay, pero la Arquitectura es la Arquitectura! Créeme si te digo que me planteo muy seriamente cursar la carrera. Sería el no va más. ¿Te imaginas? Yo, Tolico, arquitecto; y a crear, a innovar, a ser admirado.
—Darías el golpe, colega: Tolico, el canario arquitecto. Ahora bien, ¡con qué facilidad pasas de tu deseo de cursar la carrera a sentirte triunfador en una profesión tan dura y competitiva!
—España y yo somos así, Manoliño. ¡Qué redonda me quedó la respuesta! Y, ¿a que no sabes dónde estudiaré?
Sospecho que en A Coruña.

jueves, 16 de octubre de 2008

En el Día Mundial de la Alimentación

—Sabes, Tolico, que las celebraciones mundiales no me hacen gracia, pero están ahí y los medios de comunicación nos las presentan y nos hielan la sangre a poca sensibilidad que uno posea. Lee esta noticia y me dirás, supongo, que se comenta sola.
—Triste es reconocerlo, pero los seres humanos, Manoliño, sois los mayores depredadores de vuestra propia especie.
—Y esa ingente e inconmesurable cantidad de dinero inyectado al sistema hace que las bolsas efectúen picos incomprensibles para quienes somos ajenos a ese mundo, y no falta quien escandalice con los premios recibidos por contribuir con su ineficiencia a crear el caos, como ya comentábamos hace unos días; por no referirnos a los salarios y beneficios fuera de la realidad percibidos por la cúpula ejecutiva causante de tanto desatino.
—No te quepa duda, colega, de que alguna mano negra con una increíble capacidad de acción mueve los hilos de las marionetas que sois los seres humanos y engorda sus michelines a costa del pan de los congéneres. La pregunta del millón que yo me hago, un humilde periquito, es: ¿cómo combatir —y utilizo el verbo combatir con toda la carga que posee—, cómo combatir tanta ignominia sin caer en el quijotismo y en la demagogia?

miércoles, 15 de octubre de 2008

¡Indulto para Quinín!

—Manoliño, preparemos una gran pancarta pidiendo el indulto para Quinín y exhibámosla en la Puerta del Sol, el centro del universo, la plaza de la aldea global, como tú dirías.
—Toda iniciativa que tú apadrines, Tolico, cuenta con mi apoyo incondicional.
—¡Cuídate, Manoliño, que, en los tiempos que corren, el término incondicional tiene connotaciones políticas de gran calado!
—Vayamos al grano, colega. ¿Qué perseguimos?
—¡Salvar a Quinín de las fauces de un destino atroz! ¡Quinín, te envío mi solidaridad!
—Pero, ¿quién es Quinín, Bartolo?
—Parafraseándote, Manoliño, te diré que Quinín es Quinín.

martes, 14 de octubre de 2008

El alcalde torpedea las iniciativas de Tolico

—Me siento muy triste, Manoliño.
—¡Tolico, por Dios, arriba esos ánimos! Cuéntame.
—Verás: yo tengo en mi cabeza una iniciativa publicitaria que ejecutaríamos tú y yo esta Navidad para dar el salto definitivo con el blog.
—¿Y?
—Que el señor alcalde me la chafó.
—¡Vamos! ¿Desde cuándo tienes línea con el señor alcalde?
—¿Línea? Él tiene la ordenanza, y no es favorable a mi plan. Porque yo había pensado que tú intervinieras como hombre anuncio y yo me acomodaría sobre tu hombro; así, promocinaríamos el blog por el entorno de la Puerta del Sol. ¿A que es buena idea?
—No tengo duda alguna, colega. ¡Lástima que el señor alcalde vele por tu dignidad y la mía!
—¿Sabes lo que te digo? Cuando dentro de unos días venga a cobrar la contribución, pásamelo y hablamos de tú a tú.

lunes, 13 de octubre de 2008

La tragedia vuelve al mar

(Playa de Soesto, en Laxe. Fotografía tomada de la web municipal)

—Los hechos sucedieron a mediados de diciembre de 1830. El buque Adelaide se dirigía a Las Antillas desde Bristol cuando el infortunio le aguardaba agazapado en el entorno de Laxe, en La Costa de la Muerte. Allí naufragó y perecieron trece tripulantes y dos pasajeros, Francisca y Guillermo, madre e hijo, y salva su vida una única persona, el capitán Guillermo Novell, esposo y padre, respectivamente, de Francisca y Guillermo. ¿Es posible mayor crueldad del destino? El capitán, único superviviente, mientras perecen su mujer, su hijo y la tripulación. Cuentan las crónicas que don Guillermo vagó por Laxe como alma en pena durante semanas con la Biblia bajo el brazo.
—No me gustaría estar en su pellejo, Manoliño.
—Ni a mí, Tolico. Y otra vez, la tragedia vuelve al mar con tintes que recuerdan el drama del Adelaide.

domingo, 12 de octubre de 2008

¿Huir?

“Nada se arregla huyendo carretera abajo. La vida es cuesta arriba y tienes que ser fuerte.”
Asha Miró
y Anna Soler-Pont, en
Rastro de Sándalo

(Gracias, Olivo, por la aportación)

sábado, 11 de octubre de 2008

El cocido en verso

Retrato del cocido madrileño:

Con medio kilo de vaca
y diez céntimos de hueso,
un cuarterón de tocino
y un buen chorizo extremeño
y garbanzos arrugados
que ensanchan en el puchero,
sale en mi casa un cocido
que nos chupamos los dedos.

Cuando quiera usted probarlo
a las doce lo ponemos
que a la española se come
el cocido madrileño.

Téngame usted por su amigo,
Joaquín García Cornejo,
fábrica de mariposas
en la calle de Toledo.

José Fernández Bremón

viernes, 10 de octubre de 2008

La gastronomía, patrimonio cultural

—Hay días, Manoliño, en los que, si me dejase llevar por mis impulsos primarios, con sólo leer el título de la entrada, echaría a volar. ¿Te has vendido a alguien? Con lo que está cayendo y tú pretendes entretener a nuestros amigos con cuestiones gastronómicas. Por favor, ¡un poco de rigor!
—Relájate, mi querido amigo, que yo sé que las barritas te quitan el sentido; y las vitaminas, ¡hay que ver cómo te sueltan el canto! Y cómo te pirra participar de los desayunos en fin de semana y…
—¿Pretendes acaso crearme mal ambiente ante nuestros amigos?
—No te ofendas, Tolico, que yo me hallo tan sorprendido como tú, porque, como dices, con lo que está cayendo y el Congreso y el Gobierno se entretienen en hacer de la gastronomía patrimonio cultural.

jueves, 9 de octubre de 2008

La aldea global, escandalizada

—Para escándalo, Manoliño, el de este blog, que cuando no estás por la labor de redactar la entrada del día, me tienes detrás de ti como un tonto. Veamos, ¿a qué escándalo nos referiremos hoy?
—La imagen que ilustra la información tiene la virtualidad de crear rechazo, repulsión, y el desarrollo de la noticia enerva y saca de sus casillas al ser más sereno. Lee y reflexiona tú mismo.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Ningún tonto se la machaca, con perdón

—No te reconozco, Manoliño. ¿Y ese lenguaje barriobajero?
—En Cabo Cocodrilo, una localidad australiana, Charlie, un tímido e inadaptado, dejó de un veterano de la guerra de Vietnam su reloj, su cámara de vídeo y no sé qué más.
—¿Insinúas que Charlie se lo zampó?
—Lo afirma la noticia.
—¿Y dices que se caracteriza por ser tímido e inadaptado?... Pero, ¿quién es Charlie?
Charlie es Charlie.

martes, 7 de octubre de 2008

Los precios en origen se reducen a la mitad

—Ignoro a qué precio compran el berberecho los usuarios en el mercado, pero estoy seguro de que lo pagan caro, muy caro, Tolico.
—Ya se sabe, Manoliño, que los productos del mar, aun los modestos, son caros de adquirir.
—Lo triste, penoso y trágico es que los mariscadores, los auténticos paganos junto con los compradores finales, vean reducido a la mitad su precio en origen.

lunes, 6 de octubre de 2008

El azar confirma la crisis

—¡El azar confirma la crisis! ¡El azar confirma la crisis! ¿Hace falta que alguien te confirme algo tan evidente como la realidad que vivimos, Manoliño?
—Hay ocasiones, Tolico, en las que resulta más prudente no darse por aludido y continuar, y eso haré también hoy. Leo la revista Capital de este mes, y entro a su web con la intención de enlazar un suelto. Encuentro, para mi sorpresa, que aparece reproducida la revista…, pero sólo unas páginas.
—Decididamente, estás tonto del todo. ¿No pretenderás que la editora reproduzca la revista al completo? En ese caso, ¿a quién se la venderían? ¡No hago carrera contigo! Anda, cuenta, cuenta.
—Pues, una imagen muestra una larga cola de personas accediendo al INEM, y las personas que salen forman otra larga cola de acceso a un despacho de loterías. Al lado, unas pocas líneas dan cuenta de que en el primer semestre, los usuarios de juegos de azar gastaron más de un 3% que en igual período del pasado año.
—Y ahora, yo debo recordar a Camba cuando en uno de sus artículos desde Londres observa cómo los ingleses confían en sí mismos, en contraposición a los españoles, que preferimos confiar en el azar. Pero, ¡qué mayor estás, Manoliño!: hemos tratado este asunto coincidiendo con el sorteo del Niño.

domingo, 5 de octubre de 2008

Lo bueno, si breve…

Y Henry Ford dijo:

Si crees que puedes o no puedes, estás en lo cierto.

sábado, 4 de octubre de 2008

¡Qué tristes suenan las campanas cuando tocan a muerto!

“E ti, campana de Anllóns,
que vagamente tocando
derramas nos corazóns
un bálsamo triste e brando,
de pasadas ilusións.
[…]
Campanas de Anllóns,
noites de lunar,
luna que te pos
detrás do pinar;
adiós…
adiós…
adióoos…”.

(Eduardo Pondal)

En memoria de mi amigo Teodosio.

viernes, 3 de octubre de 2008

Elecciones a la vista

—Déjame a mí, Manoliño, que para eso me tienes, para sacarte las castañas del fuego en los asuntos delicados en los que tú no quieres mojarte. Por cierto, ya queda poco para el tiempo de las castañas, ¡qué ricas! Al grano. Todo lo que el sistema haga en favor de nuestros mayores, ¡chapó!, y siempre será poco para lo que ellos se merecen; ahora bien, después de tres años de legislatura, a unos meses vista de nuevas elecciones, una paga extraordinaria de 200 euros a los jubilados gallegos se presta a interpretaciones. Menos mal que en este blog no se tratan asuntos religiosos ni políticos.

jueves, 2 de octubre de 2008

Tolico se muda

—Manoliño, recomiéndame un lugar tranquilo en Galicia.
—No entiendo nada.
—No me extraña. Nadie puede dar lo que no tiene y tú estás en caída libre. ¿Es que no lees? ¡Quiero trasladar mi residencia a Galicia!
—Acabrás volviéndome loco, Tolico. ¿Qué relación existe entre mis lecturas y tu deseo de vivir en Galicia?
—Galicia tiene algo.
—Vaya descubrimiento.
—¡Vaya descubrimiento! El descubrimiento lo ha realizado la ciencia: el semen gallego es el de mejor calidad, y eso lo da la tierra, el ambiente, el carácter, la actitud ante la vida, la menor dependencia del ordenador
—¿Y en qué te afecta el uso del ordenador y esa noticia relativa al semen?
—Algunas veces no sé si pareces tonto o si lo eres de verdad. Deduzco de estas informaciones que el empleo del ordenador es uno de los factores que deteriora la calidad del semen y yo debo cuidar la continuidad de la especie.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Justicia medieval y operación carrusel

Me pide Manoliño que sea yo, Tolico, quien escriba la entrada del día. ¡Por fin empiezo a ser considerado! Y, ¿a qué puedo referirme? No hace falta que medite mucho. Por un lado, me llama la atención la justicia medieval que practicaron unos ciudadanos del Reino Unido. Por otro, no puedo evitar referirme a la operación carrusel. ¿Cabe mayor degeneración? Está claro que hechos así sólo pueden darse en la raza humana. Si a esos degenerados le aplicaran la justicia medieval de la noticia anterior, estoy persuadido de que otros muchos se autorreprimirían para evitar ser objeto de escándalo y conservar su imagen de ciudadanos probos, pero no es novedad que el sistema hace aguas como si fuese un cesto de mimbre.