miércoles, 19 de noviembre de 2008

Infidelidad virtual y divorcio real

—¿Qué te sucede, Tolico? ¿Qué runruneas?
—No lo entiendo, Manoliño. Por más que releo la noticia, no entiendo nada. Porque, el mundo virtual es virtual, y el real es real, ¿o no?
—Entiendo que así es.
—Pues nada, que una ciudadana inglesa se siente traicionada porque su marido mantiene un affaire en Second Life; y, de resultas, se divorcian. Tengo que entrar a Second Life y explorar qué se cuece por esas latitudes. Porque, si cada vez que una pajarita mona se me cruza y yo me embobo mirándola me pidiera el divorcio mi compañera… Porque, yo soy un ser sensible y valoro la belleza… Pero, ¡di algo!, que no sé si tu silencio asiente mi parecer o me estás censurando.
—Me pregunto si cada día estaremos un poco más locos. No puedo evitar que acuda a mi cabeza el caso de un despacho lucense que tramita lo que llama el divorcio exprés, y lo hace a través de Internet, excepto “el pago de la minuta”.
—Y digo yo, Manoliño, que, si el divorcio se puede resolver por Internet, por reciprocidad, deberían poder realizarse los enlaces también a través de la Red. ¡Qué invento!

No hay comentarios: